Porque traigo esos recuerdos a ustedes, ya se imaginaran, pues que nos hayan eliminado en cuartos de final de la copa América era algo que se podía prever por el nivel del futbol suramericano, aunque duele pero es así; para los expertos del futbol en América tenemos una gran nomina y un potencial grandísimo, en eso creo que estamos de acuerdo, pero donde está el amor a la camiseta, la entrega y el sacrificio la rabia que se le ve a los jugadores uruguayos yendo a cada balón con ganas de ganarle a cualquiera, nos falta mucho de eso, ahora tenemos un grupo de modelos en la selección que les preocupa más el corte de cabello y el contrato publicitario que la gloria deportiva, ya no nos queda nada hemos involucionado futbolísticamente y estamos dejando atrás un proyecto lindo que pudo darnos grandes resultados, y que comenzó hace unos años en las selecciones menores.
Aclaro no me alegra lo que paso pero era de esperarse, no tenemos garra ni hambre de ganar, nos falta mucho de otras selecciones como la venezolana que hoy le juega de igual igual a cualquiera con menos nomina que Colombia.
Tampoco voy a tirar fuerte contra Bolillo, porque estaría solo hablando de un problema que va mas allá de un técnico, bueno también quiero dejar claro que me parece un mal técnico, pero lo que más me entristece de todo es la mediocridad del periodismo deportivo de los canales nacionales más importantes, que no tienen criterio y peso para hacer una buena crítica constructiva acerca de lo que paso y lo que viene, y se quedan en comentarios mediocres que influyen en el pensamiento de muchos colombianos, compatriotas “NO HICIMOS UNA BUENA COPA AMERICA, NO JUGAMOS BIEN, NO TENEMOS NADA PARA LA ELIMINATORIA, DEJEN DE DEJARSE METER LOS DEDOS A LA BOCA, NO MAS MEDIOCRIDAD”, yo quiero que mis hijos crezcan en un país donde ganar no lo es todo pero siempre hay que querer hacerlo.
Bueno ahora hay que comenzar de nuevo, ojala un técnico al estilo de Bielsa, Markarian o Farias, y señor Maturana perder no es ganar un poco “perder es perder”.
ORLANDO MORALES Z.